Después de unas cuentas incursiones esporádicas al río Samborombón, motivadas primero por la cercanía y luego porque empezaron a aparecer cosas interesantes y nuevos desafíos, llegué a la conclusión que había llegado el tiempo de conocerlo a fondo. Y para conocerlo a fondo nada mejor que recorrerlo en forma completa, de punta a punta, desde su nacimiento hasta la desembocadura en el río de La Plata. En línea recta, entre principio y fin hay unos 129 km, pero su desarrollo, debido a sus meandros, pasa los 207 km.
Pero cómo hacerlo? En vehículo a motor (Chata, moto, cuatriciclo) sería genial pero el río atraviesa muchos campos alambrados y eso lo hace inviable para hacer el recorrido con detalle. Se podría hacer lo que ya vengo haciendo, es decir entrar hasta donde se pueda por huellas y caminos vecinales, pero eso deja ocultos muchísimos secretos del río.
¿En canoa? También sería genial pero este río es casi digital: o está seco o está inundado. Obviamente lo primero descarta la canoa y lo segundo hace difuso el cauce y de nuevo esconde la mayor parte de sus secretos. A pie, se tardaría mucho, por lo tanto, la única opción que queda es recorrerlo en una bicicleta todoterreno, a lo sumo con alguna chata de apoyo en algún tramo.
Así nació el proyecto “Todo el Samborombón”, consistente en recorrer lo más fielmente posible el cauce del río en bicicleta.
Para ello me puse a investigar todo lo posible acerca del río y la verdad que no parece haber mucho disponible. No hay datos precisos de su hidrología, ni de dónde nace, solamente una simpática historia que nos muestra de donde viene su extraño y tamboril nombre.
Si bien en varios lados indica que nace entre el partido de San Vicente y de Cañuelas, al sur de la RP06, lo más preciso que encontré fueron los viejos mapas del IGM, que van bautizando sus afluentes de modo de poder identificar el cauce principal y de ese modo llegar a las fuentes del mismo.Contrastada esa información con las imágenes satelitales del Earth Google, identifiqué la laguna donde el río nace y de ese modo ya tenía el punto de partida.Luego analicé el recorrido completo dividiéndolo en etapas de 15/20 km, en lo posible entre accesos vehiculares. Sólo faltaba decidirse y empezar.
Y un día empezamos...